lunes, 25 de junio de 2007

A ver qué sucede.


Si hay algo que me parezca realmente difícil en este mundo eso debe ser o parir o crear un blog y definir qué ($*/%&) escribir en él. ¿”About”? ¿”About” qué?


¿Para qué te quiero, “Batahola: Una paradoja llena de silencio”? Me parece que es esto mismo, sí. Mi deseo es gritarle al mundo lo que llevo por dentro y que éste no sepa reconocer mi voz. Bulla y parquedad: soltar un ruido grande y con sentido sin siquiera abrir la boca.


¡Qué rico! Ser incógnita, invisible y sola. Es como pasar corriendo -y hasta saltando- por Alberto del Campo sin que los obreros de la construcción me griten piropos vulgares; como recitarle al cobrador del micro la sinopsis de esa película protagonizada por él mismo que se me acaba de ocurrir durante el camino y no ser bajada a la volada del bus; como decirle (en plena clase) a mi profesor de Filosofía que sí, que yo no soy como la demás gente de esta universidad que tanto critica y que daría todo por largarme en ese mismo instante a estudiar lo que, a duras penas, nos trata de enseñar en la clase; como introducir sutilmente en los pensamientos de esa chica que lleva falda roja aterciopelada y botines toscos-chabacanos-y-muy-negros, la idea de que esa es la peor combinación que pudo elegir EN SU VIDA y, sobre todo, como dejar de mentir tanto.


Y no es que llene el conducto auditivo de aquel que me rodea de palabrejas que denoten falsedades, pero sí omito varios pensamientos.


Y no es que diga mentiras, pero sí dejo de decir verdades.


Y no es que las verdades sean cruciales y le esté jodiendo la vida a los otros por no mencionarlas, pero sí me cuesta sacarlo todo.


¿Qué hacer? Soy una mujer que no siente roche por nada y, sin embargo, muy reservada también.


¿Seguro que todavía quieres leerme?

4 comentarios:

Chema dijo...

Por mí encantado.

Batahola dijo...

Jajaja.
¡Qué amable!

Chema dijo...

^.^

varguitass dijo...

"ya pues" (con voz de Machín cuando se casa con Wendy)